A los pocos meses de nacer, le detectaron una discapacidad visual por una enfermedad rara de la retina, pero gracias a la formidable actitud de su familia, creció con total normalidad.
A los 6 años, se trasladó de Tenerife a Alicante, para poder cursar sus primeros estudios en uno de los colegios de la O.N.C.E. que había entonces, donde destacó por sus buenas calificaciones y por los diversos reconocimientos en esa etapa.
Cursó el bachillerato en un instituto «normal» de Alicante, ya con compañeros sin ninguna discapacidad, aunque no le costó ser uno más debido a su actitud positiva y de no ponerse barreras. Aunque su ilusión hubiera sido ser periodista, acabó estudiando Derecho en la UA, carrera que no terminó debido a la decepción y desilusión que se llevó con respecto al sistema jurídico y a que se cruzó en su vida lo que hasta hoy ha sido su gran pasión: la música, concretamente, la batería.
Desde entonces, intentó ganarse la vida como músico, creando múltiples bandas, entre las que destacó «Born to be Queen, banda tributo al mítico grupo de Freddie Mercury, con la que tocó por toda España, teloneando a bandas del prestigio de Danza Invisible y actuando en actos oficiales, como la V Convención de Fans de Queen, en Madrid, como tributo invitado.
Tras esta etapa y con la carrera por terminar, Diego acabó vendiendo cupón en la O.N.C.E. y jugando al fútbol para ciegos como válvula de escape y fue gracias al fútbol donde conoció a los que, actualmente, son sus socios en Timpers que, en aquel momento, eran los entrenadores del equipo de Alicante, donde Diego jugaba.
Tras montar la empresa, en mayo de 2019 se mudó a vivir a Valencia con sus socios, para poder entrar en Lanzadera, la aceleradora de empresas de Juan Roig y hasta hoy lleva las áreas de comunicación y RRHH, materias que le encantan.
Por motivos de trabajo, en octubre de 2020 conoció a la persona que es su actual mujer y en enero de 2024, fue padre de un niño maravilloso, con lo que piensa que lo mejor, está todavía por llegar.